En el arranque de la octava fecha del Clausura, Unión consiguió tres puntos sufridos frente a un batallador Deportivo Aberastain que lo complicó más de la cuenta.
El triunfo de los dirigidos por Cachilo Magallanes fue 2-1, aunque el naranja pocitano fue el que dió el primer golpe.
Fue en una pelota detenida que Eduardo Ortiz metió un gran derechazo de tiro libre que nada pudo hacer el arquero Federico Puga.
Ese gol despertó al Azul que se fue a buscar el empate y lo logró a los pocos minutos gracias a una pelota suelta dentro del área que capitalizó Luciano Riveros para igualar el marcador.
El final del primer tiempo encontró a Unión metiendo en todos lados y el Naranja aguantando, pero también creando chances.
Ya en el complemento, los de Cachilo adelantaron las líneas y obligaron a Aberastain a replegarse y jugar de contra.
Cuando todo parecía indicar que los de Cuenca se llevarían un punto de oro del 12 de octubre para cortar esa sequia de cuatro derrotas en cadenas, apareció en Santi del gol.
Santiago Ceballos, de cabeza, marcó el segundo a tres minutos para el final. Delirio en las tribunas y en el banco azul porque sacaron adelante un partido que fue mas complicado de lo que parecía.
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